Cundo ella me mira
de esa manera,
yo daría la vida entera,
por volver a ser ese niño,
que ella abrigaba con su cariño.
Yo quisiera esquivar su mirada,
pero no puedo hacer nada,
ante un alma que se siente enamorada,
ante tan bella flor con ese aroma de amor.
Me mira y yo quedo como hipnotizado,
ni un Ave María he rezado, cuando
me siento extasiado y me da por escribir,
esas cosas que me dicen sus bellos
ojos habladores.
Es que entre ella y yo no se precisan
palabras, que solo viene a ser como ruido,
para los versos que con cada latido,
le recita mi corazón...
Es que cuando ella me mira
de esa manera,
sacude mis comodidades,
reta mi fe y me llama a caminar
junto a ella, la ruta del peregrino,
esa donde Jesús es el camino.
Oxwell L’bu copyrights 2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario