martes, 28 de enero de 2020

***En los brazos de la Imma***

***En los brazos de la Imma***
Cuando mi alma ha perdido la calma,
cuando me siento perdido
y por la prueba abatido,
busco su presencia.

Cómo se busca el agua
en el desierto, como se anhela
una luz en medio de la densa
obscuridad, porque a decir verdad,
el temor a hecho a un lado al amor.

Más es ella quién sale al encuentro,
es ella la que con una visitación,
le da paz y certeza al corazón,
porque cuando ella te abraza,
con su amor te rebasa.

Son los brazos de María,
más que un refugio, son pilares
de fortaleza, que con su tibieza
te animan a seguir luchando,
en esta vida donde no faltan
las tribulaciones y las pruebas.

En los brazos de la Imma,
me siento como se sentía Jesús,
querido y amado y me recuerdan
que en la cruz, está El con los
brazos extendidos, no para rechazarme,
sino con ella abrazarme. ***En los brazos de la Imma***
Cuando mi alma ha perdido la calma,
cuando me siento perdido
y por la prueba abatido,
busco su presencia.

Cómo se busca el agua
en el desierto, como se anhela
una luz en medio de una densa
obscuridad, porque a decir verdad,
el temor a hecho a un lado el amor.

Más es ella quién sale al encuentro,
el ella la que con una visitación,
le da paz y certeza al corazón,
porque cuando ella te abraza,
con su amor te rebasa.

Son los brazos de María,
más que un refugio, son pilares
de fortaleza, que con su tibieza
te animan a seguir luchando,
en esta vida donde no faltan
las tribulaciones y las pruebas.

En los brazos de la Imma,
me siento como se sentía Jesús,
querido y amado y me recuerdan
que en la cruz l, está El con los
brazos extendidos, no para rechazarme,
sino con ella abrazarme.
Oxwell L’bu copyrights 2020

domingo, 19 de enero de 2020

“Como el sol de la mañana...”

“Como el sol de la mañana...”
Cálida, como una luz que inunda con su presencia, así es la Madre...Jeshua keroin Imma.

Los tulipanes sobreviven en sus trincheras, como la fe resiste ante la prueba, como la luz resplandece ante la oscuridad. Así María permanece en ese silencio contemplativo, no porque no tenga nada que decir, sino porque el silencio suele ser más elocuente que las palabras.

Imma, la Madre, la mamita, como la llamaba el Verbo, como con gemidos inefables, la llama mi alma... Imma, la madre que acompaña, la calidez que rompe el hielo de la indiferencia; la mano que guía con amor y paciencia.

En ese frío inaudito, donde creemos comunicarnos, dónde de mil formas, el alma lanza un grito desesperado, que nadie escucha, porque cada quién, está en busca de su propia trascendencia, de su propio sufrimiento... Pero ella es solidaria, conoce esa frialdad, frialdad que experimentó en el pesebre y frente a la cruz.

Imma,la mamita amada, el amor del Redentor.
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viernes, 3 de enero de 2020

***Si cuando oramos***

***Si cuando oramos***
Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! (43) ¿De dónde a mí que la madre de mi Señor venga a mí? (44) Porque así que sonó la voz de tu salutación en mis oídos, exultó de gozo el niño en mi seno. (45) Dichosa la que ha creído que se cumplirá lo que se le dijo de parte del Señor: (46) Dijo María: Mi alma magnifica al Señor (47) y exulta de júbilo mi espíritu en Dios, mi Salvador,(48) porque ha mirado la humildad de su sierva; por eso todas las generaciones me llamarán bienaventurada, (49) porque ha hecho en mí maravillas el Todopoderoso, cuyo nombre es santo. (50) Su misericordia se derrama de generación en generación sobre los que le temen. San Lucas 1:42-50

Si cuando oramos invocamos
el nombre de María,
ella se hace presente;
ella, no busca nuestras alabanzas,
más bien guía nuestra oración,
para que junto a ella alabemos al señor...

Su voz es como un suave suspiro,
como un inefable gemido,
que romper el silencio
y pone un cántico en el corazón,
para alabar y bendecir el
nombre del Señor.

Sus palabras son de profundo amor,
sonde gratitud infinita al Creador,
por habernos dado al Redentor;
ella, la llena de gracias deja un profundo
gozo en cada visitación,
que se da cuando junto a ella alzamos,
nuestra alabanza y oración.
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