(Como fueron eso 9 meses)
Cuando mis ojos se posan, sobre una flor esperando a su retoño, no puedo evitar, el evocar a la Madre..
Con su mirada dulce y penetrante me miro y luego suspiro. Mis labios recitaron, la salutación: Dios te salve María... Otro suspiro dejo escapar, preferí callar.
Después de un momento, su dulce voz, rompió el silencio y dijo: -Te preguntas, cómo fueron esos nueve meses y te dire que los más dichosos de mi vida terrenal, con sobre saltos, con amenazas, con incertidumbres, pero sobre todo de un gozo, que de no ser, por la forma en que el Altísimo me sostuvo, hubiera muerto de felicidad. Porque su Amor se apoderó de mí, en una simbiosis divina en la que el amor y la fe creció y la duda menguó.
Madre y si hay tanta alegría, en la maternidad, porque hay mujeres que abortan. Hay madres que abortan, porque el demonio las acorrala y convence, luego del hecho, las abandona en su desesperación y les deja una herida eterna en el corazón, que sólo si imploran la misericordia divina, está podrá sanar.
Porque una mujer puede tener muchos títulos y dignidades, pero el de madre, es el más excelso, el más sublime y el que más la acerca Dios.
La Paz que refleja tu mira,
tus labios evocando una canción
y tus manos como mariposas,
van tejiendo, un arco iris
de ilusión...
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